Estamos rodeados de naturaleza,el concierto diario está a cargo de los pajaritos... azulejos,carpinteros, bichafues  y las guacharacas. Este sitio huele a flores,naturaleza,crema dental,  comidita, rosas, orquídeas,pasto fresco.

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De octubre a enero tenemos la oportunidad de ver la cordillera central en todo su esplendor,algunas veces se ven dos nevados,su blancura resplandece,esto dura pocos minutos porque la neblina cierra estos regalos que Dios nos da,  pero toda esta magia y el asombro de los niños les permite aprender de manera vivencial su región.

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El círculo de la palabra permite que dialoguemos todos, respetando el turno y a un mismo nivel, aprendemos todos de todos, escuchamos, aunque es difícil, sembramos semillas para crecer física, mental y espiritualmente.

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Sabemos de plantas, animales, amigos, preparamos repelentes, hacemos semilleros con tubos de papel higiénico, conocemos a nuestros vecinos, los invitamos a participar de nuestras actividades, lo mismo que a nuestros compañeros, coordinadores y a la rectora.

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Llegamos a un sitio que reverdece en compañía de las familias de los estudiantes, de los profesores acompañantes, de las coordinadoras y de la familia de la rectora.

No estamos solos en este gran proceso, nos acompaña el museo + escuela (La Tertulia) y el colectivo sembrando  ando(U.V.)  para que la sede rural Tulio Enrique Tascón siga reverdeciendo y brinde oportunidades especiales a la institución educativa Eustaquio Palacios.

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